El multilingüismo conlleva beneficios notables en el cerebro de los niños y niñas
Aprender tres idiomas tiene beneficios vinculares, de sociabilización y académicos. A futuro, es un gran valor en el camino profesional; hoy, un gran valor en el camino personal de cada alumno y alumna.
Estudios han demostrado que aprender múltiples idiomas desde una edad temprana estimula la plasticidad cerebral, lo que mejora las habilidades cognitivas, como la resolución de problemas, la toma de decisiones y la multitarea. Además, fomenta la agilidad mental, dado que se debe alternar entre diferentes lenguas y estructuras gramaticales.
El multilingüismo fomenta una comprensión más profunda de las estructuras lingüísticas y promueve una apreciación más amplia de las culturas y perspectivas del mundo. La exposición temprana a diferentes idiomas no solo fortalece la capacidad de aprendizaje en general, sino que también prepara a los individuos para un mundo globalizado en el que la comunicación intercultural es cada vez más esencial.
El idioma hebreo es parte de la identidad judía. El hebreo es un idioma con una rica historia y tradición cultural que se remonta a miles de años. Aprender hebreo puede permitir una mejor comprensión de la historia, la literatura, la religión y la cultura judía. Además, aprender un nuevo abecedario implica la formación de nuevas conexiones neuronales en el cerebro del niño y la niña.